12 DE SEPTIEMBRE DE 2017

CONSTANCIA

El lunes 4 de septiembre, el presidente Juan Manuel Santos, confirmó que el gobierno había recibido una carta del Señor Dairo Úsuga, alias Otoniel, jefe de la banda criminal, conocida como el Clan del Golfo, en la que ratificaba su disposición de entregarse junto a sus hombres.

Igualmente el Presidente de la República manifestó que: “Se trataría de un sometimiento, no de una negociación política, que también habían buscado, aunque saben que ahí no hay posibilidad, pues ellos no son actores políticos, son unos delincuentes, narcotraficantes, y si se someten a la justicia, la ley prevé que pueden tener algunos beneficios”

Tal como lo han evidenciado algunos medios de comunicación, un día después del enunciado pronunciamiento, el país conoció  un video en el que aparece Otoniel, y en el que manifestó   la intención de alcanzar una salida digna y voluntaria para todos sus combatientes, acogiéndose a la justicia con garantías que direccionen a la reconciliación nacional y  que ese paso lo darían tan pronto se dieran las condiciones, estando dispuestos a suspender todas las actividades ilegales de la organización.

No hay que olvidar que ese mensaje se conoció tan solo cuatro días después de la muerte, en una operación de la Policía y las Fuerzas Militares, de Roberto Vargas, alias Gavilán, jefe militar y segundo al mando de esa organización.

Ya con las Farc desmovilizadas y en pleno proceso de paz con el ELN, se han dado cuenta de que todo el poderío militar está enfocado en ellos. Esa presión agobiante los condujo, seguramente,  a anunciar el sometimiento de un grupo que tiene cerca de 3.000 hombres, presencia en 19 departamentos y que controla todas las rutas del narcotráfico.

Pues bien, ante estas manifestaciones de sometimiento a la justicia colombiana, por parte del jefe y los integrantes del denominado Clan del Golfo, considero que es el momento propicio   para que en Colombia se extienda el manto de  la paz y evitemos más muertes innecesarias, así como el reclutamiento de menores y victimas que lo único que generan es más violencia en nuestro país,  claro está, y como lo ha expresado el Señor Fiscal General de la Nación; ese sometimiento debe estar  condicionado a que dejen de cometer delitos, entreguen todos sus bienes  y activos ilícitos y revelen la ubicación de cultivos y rutas del narcotráfico.

Como colombiano y Senador de la Republica, mi total apoyo al Gobierno Nacional, en busca de las herramientas legales necesarias, que conlleven al sometimiento  de esa banda criminal.

JIMMY CHAMORRO CRUZ
Senador de la República.